El mundo imaginario



Dicen que si los seres humanos no pudieran soñar por las noches se volverían locos; del mismo modo, si a un niño no se le permite entrar en el mundo de lo imaginario, nunca llegará a asumir la realidad. La necesidad de relatos de un niño es tan fundamental como su necesidad de comida y se manifiesta del mismo modo que el hambre.
 
 
  Paul Auster
  Ilustración de Víctor Nizovtsev
Fuente: Estrategias educatias

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