Puedes ser libre, si te lo propones...
Sí, desapego sin anestesia, sin excusas, tan radical como te sea posible y hasta las últimas consecuencias, seas un robusto roble o un trémulo retoño. Cuando en verdad decidas desprenderte de eso que te aprisiona emocionalmente y te roba toda tu energía, tu pensamiento será tan sencillo como liberador:
Ya no te necesito, dejaste de importarme .
Ya no te necesito, dejaste de importarme .
! Y a vivir! "
Walter Riso
Comentarios
Publicar un comentario